La madera es un material versátil, económico y ofrece multitud de posibilidades en el mundo de la construcción. No obstante, se trata de un ámbito muy complejo, donde es necesario conocer todos los tratamientos previos y el mantenimiento necesario antes de colocar la estructura o elemento con este material.
En este post te presentamos el tratamiento de la madera por el equipo Banema en proyectos de construcción.
Madera nueva
La madera nueva, por definición, es aquella que se compra preparada con un tratamiento antihongos, ignífugo o resistente a la intemperie. En función de la aplicación, se puede adquirir en tablones o piezas de diferentes formas y tamaños.
Antes de proceder a su utilización, es necesario aplicar una imprimación o una selladora y terminar con un acabado adaptado a su uso final, por ejemplo un efecto texturizado con esmalte o laca.
Para aplicar cualquier tipo de pintura aplicaremos una imprimación o selladora y a continuación un esmalte (laca) o un esmalte sintético.
Madera reciclada
En el caso de las maderas “usadas”, “viejas” o “recicladas”, será necesario eliminar el producto existente para obtener una madera virgen y aplicar el mismo tratamiento que en las maderas nuevas.
Después, se podrán utilizar esmaltes, imprimaciones o pinturas de cualquier tipo al igual que lo haríamos con una madera nueva.
Como has podido comprobar, el mundo de las maderas carece de reglas fijas, porque cada madera tiene un comportamiento totalmente distinto. No olvides que estos tratamientos deben estar aplicados por un especialista para mayor garantía.
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